Por un lado, me encanta Navidad. La cantidad de comida, inagotable; los besos y saludos y abrazos; la idea de felicidad perpetua; los buenos deseos para todos; la garrapiñada y las confituras, perdición de cualquier alma golosa como la mía; los fuegos artificiales, el armado de regalitos para los más chicos, el disfraz de Papá Noel para que los nenes lo persigan... Todo el show que se arma es maravilloso y mágico.
Por otro lado, lo estamos pasando en Mar del Plata, llueve y hace mal tiempo hace ya no sé cuántos días, y los campeonatos de generala y de diez mil me están cansando un poco.
La conclusión es que, si no mejora, me voy a comprar absolutamente todas las pasas de uva al chocolate que pueda encontrar, y a encerrarme con el libro gigantesco que estoy leyendo. Y no salgo hasta que Zeus no me dé un buen día de playa.
En fin, las fiestas me están tratando mejor de lo que esperaba y de lo que me tenían acostumbrada, por ahora. Vamos bien.
¡Muy felices fiestas para todos!
La última vez que fui a Mar del Plata me perdí en sus librerías y volví con un bolso extra cargado de libros.
ResponderEliminarEs lo único que destaco de esa ciudad.
Suerte!
J.
Es una idea excelente! Un beso!
EliminarFeliz navidad (atrasada) y Feliz año (en término)!!!!
ResponderEliminarMuchas gracias!! Felices fiestas, totalmente atrasadas en mi caso, jaja!
EliminarA mi la navidad y año nuevo me deprime no se por qué. Lo unico bueno son los regalos, ja ja =) Felizz año!!
ResponderEliminarSí, a mí a veces también... son raras las fiestas. Feliz año para vos también!
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